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domingo, 27 de octubre de 2013

Dos años a vuestro lado.


Donde toda mi tristeza queda olvidada, donde toda mi vida queda plasmada. Donde las letras son mucho más poderosas que cualquier palabra dicha, donde lo escrito vale mucho más que lo hablado.

Cuando comencé con esto estaba enamorada, realmente lo estaba. Mi gran idea era hablar sobre mi amor, pero cuando él se fue, descubrí algo mucho más poderoso que cualquier amor: mi pasión. Mi pasión por la escritura, mi pasión por todos vosotros.

Descubrí que personas con las que ni si quiera había tratado en toda mi vida podían ser mejores que muchas otras que me conocían de siempre. Descubrí que siempre que estaba triste lo único que de verdad me alegraba era esto. Descubrí que hay personas que sin conocerte te ayudan más que nadie. Descubrí que se puede querer sin conocer.

Cuando cumplí mi primer año, otro amor invadió mi vida, escupí y reflejé mi sentimiento en letras mal dichas y sin sentido ni concordancia alguna, y aun así, ahí estabais vosotros. Y aquí estáis.

Conocéis mi vida, conocéis mi historia, en el fondo, me conocéis a mí. Vosotros, cuando al principio tan solo éramos cinco. Vosotros, cuando poco a poco fuisteis creciendo y os convertisteis en cincuenta. Vosotros, que me hicisteis feliz al cumplir los cien. Vosotros, que aquí os mantenéis siendo ciento treinta y ocho.

GRACIAS. Gracias de verdad. Muchas gracias a las personas que llevan aquí desde ese 27 de octubre del 2011, muchas gracias a las personas que se han ido uniendo hasta llegar a hoy. Muchas gracias a todas esas grandes e increíbles personas que toman unos cinco minutos de su tiempo en leer la vida de esta joven escritora. Diría gracias otras cien veces más, y nunca conseguiría agradeceros lo feliz que me hacéis.

Que no somos muchos, pero para mí somos suficientes. No somos muchos, pero los que estáis sois fieles a mí y yo a vosotros, y sabéis que siempre voy a estar aquí apoyándoos tras la pantalla.

Hoy, después de dos años, puedo decir que ésta es mi historia, la historia de mi vida, en la que vosotros formaréis parte siempre.

Gracias por siempre estar ahí a pesar de llegar a ausentarme un mes entero, de verdad que gracias.
                                                            @TumundoblogI
                                                     Tablones nuestro mundo

domingo, 6 de octubre de 2013

Te saludo un poco tarde, ruego que me disculpes.


 
Saludos, octubre.

Hace ya un año desde la última vez que te vi, no has cambiado mucho desde entonces… Bueno, como explicarte, seguimos en la misma situación, tú y yo, ya sabes, con las mismas difusas complicaciones y problemas sin sentido.
No me veo capaz de admitir que hace un año estaba exactamente en la misma situación en la que me encuentro ahora.  Escribiendo letras sin ningún significado claro entre ellas, dictando frases melancólicas y tristes.

“Hundiéndome una vez más en la tristeza de su ausencia”

En fin, no exactamente. No por él, si no por otro él distinto.
Las hojas se van cayendo poco a poco, sin freno, y yo sigo aquí, una vez más, siendo  otro títere más de otro más.
Y el verano se va, y el otoño vuelve otra vez, sin ganas de nada, esperando que el dichoso invierno vuelva a aparecer y a revolver todo lo pasado.

“Porque el problema está, en que, el pasado, no está tan lejano como yo me hago creer, que, en realidad, está a tan solo dos pasos y que puede volver cuando se le antoje…”

Pero, querido octubre, tú me vas a ayudar a que este mes sea distinto al de otros años. Tú vas a hacer que las hojas dejen de caer, tú vas a hacer que salga el sol sin que llegue a reinar la lluvia
Porque tú, amigo mío, vas a ser especial, tú vas a conseguir que ninguna lágrima más caiga de mi rostro, tú vas a ayudarme a ser feliz.
                                                                                       @TumundoblogI
                                                                               Tablones nuestro mundo