Seguidores

domingo, 19 de agosto de 2012

Mi deseo más preciado.



Eres mi gran sueño, mi deseo más preciado, mi lucha interminable.
Tan pronto como el viento, te convertiste en la persona más especial que ahora tengo, llenaste ese vacío tan grande que había quedado tras de mí, y lo llenaste de alegría y de ganas de luchar.
Es complicado, amarte siempre fue difícil, un reto insuperable.
Comenzaste siendo un reto, y acabé enamorándome.
Curioso, nunca pensé que lograría olvidar tan deprisa, tan repentinamente un amor pasado, simplemente mirándote a los ojos.
No siempre fuiste fácil, es más, eres realmente inalcanzable.
Es difícil no pensarte, no esperar tu respuesta por muy corta que sea, no sonreír aunque me moleste tu contestación.
Te convertiste poco a poco en todo lo que yo buscaba, lo que necesitaba.
¿Amor? Aun no lo sé, y, sinceramente, todavía no quiero saberlo.
___________________________________________________________
Chicas, me voy un tiempo de vacaciones :)
Nada, menos de dos semanas, y me volvereis a tener aquí.
Muchos besos a todas, las que seguis aqui, fieles a mi.

martes, 14 de agosto de 2012

Invisible.



Una vez de que me aclaro, otro problema aun mayor viene.
¿Cómo es posible, que, la persona a la que, después de mucho meditar, has decidido que es por quien quieres luchar, te ignore?
Llevo mucho tiempo luchando por la misma persona, día y noche, tratando de llamar la atención de aquel que siempre pasó de mi…
¿Es normal sentirte invisible ante la persona que más quieres?
Trato de llevarlo de la mejor manera posible, de la forma más positiva que se puede llevar este principio al fracaso.

FRACASO.

Fracaso es una palabra demasiado fuerte para describir mi estado, pero, pienso que, si, no hago ningún logro en este verano, llegaré a tocar lo más hondo.
Ni me llega la inspiración, ni mis ganas de reír aparecen.
¿Todo esto, por un tío? ¿En serio? No entiendo nada…
¿Qué hay de esa chica, que, los chicos siempre aparecían en segundo plano? ¿Dónde está, donde se fue?
Mientras que me busco, ayúdame a encontrarme, y, rescatame.

lunes, 6 de agosto de 2012

Perdí el rumbo.



Este sentimiento y esta situación es como un gran dolor continuo en el pecho, como un cúmulo de nervios de los que no me puedo librar de ninguna forma.
Tantas dudas, tantas noches en vela, tantas tardes felices pero con tantísimas noches amargas, con momentos irrepetibles y con situaciones irremediables.
El mero hecho de pensar que, todo lo que conlleva a quererte, lo tengo tan cerca, que, enloquezco, es más, enloquecí, perdí mi ser, mi claridad, mi seguridad se esfumó de tal manera en la que tardaré una eternidad en recuperar.
Sinceramente, al escribir, dudo en quién pienso, porque haga lo que haga, mis horribles dudas no se disipan, y tu mirada, tus ojos, tu boca, y todo tu ser, permanecen aquí, inmóviles, ignorando mi presencia, buscando una vida que seguir.
Éh, amigo, perdí el rumbo por ti.
No olvides que, por ti, yo estoy perdida en un agujero negro sin salida, en la oscuridad protegida por un gran vacío.
Es muy fácil echar la culpa al de al lado, pero, quizás la culpa es mía, por mi infinita incertidumbre hacia necesitarte, necesitaros.